“Es un recurso no monetario tangible o intangible de larga vida, que se mantiene en una entidad con el propósito de utilizarse en la producción de productos o servicios y que no se vende en el período normal de las actividades de una entidad”.
Se define como los bienes que una empresa utiliza de manera continua en el curso de sus operaciones para ser explotado y ponerlo al servicio de la empresa para generar utilidades, es por esto que el activo fijo no puede ser vendido en un periodo a corto plazo y se debe mantener en buenas condiciones que le permitan tener una larga vida.
Por lo general, el activo fijo es aquel que hace parte de la propiedad, planta y equipo, como son los automóviles, maquinaria, edificios, muebles, terrenos, etc., sin embargo, también se toman en cuenta aquellos activos que no son tangibles como las marcas y las patentes.
¿Cómo se divide el activo fijo?
El activo fijo de una empresa se divide principalmente en dos formas:
Activos Tangibles: Son aquellos activos que cuentan con una presencia física y es por esto que podemos verlo y tocarlo. En esta categoría podemos incluir:
Maquinaria
Edificios
Muebles
Equipo de oficina
Activos Intangibles: Estos activos no tienen una presencia física, por lo tanto no pueden tocarse, sin embargo, son de gran importancia para el desarrollo de las empresas ya que pueden ser los siguientes activos:
Marcas
Patentes
Derechos de autor
Licencias
Software
Franquicias
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